Gachas
	Por un vaso de vino Introducción o Preludio instrumental Salida cantada De la bodega niña de la bodega. Interludio de cuerda (falsete) 1ª Copla De la bodega echa un vaso de vino ole, que me lo beba echa un vaso de vino ¡ Y olé ! que me lo beba. 2ª Copla Que me lo beba echa un vaso de vino ole, que me lo beba te doy una “perragorda” ¡ Y olé ! en paz te quedas.		Jota A la mar que te vayas yo contigo me iré y si veo que te marchas no me retiraré. No me retiraré, no me retiraré, y a la mar que te vayas yo contigo me iré. 3ª copla Anda que eres la que pena me quita ole, de las mujeres la que pena me quita ¡ Y olé ! de las mujeres.
	Es la manifestación artística más importante de nuestro folclore popular. La componen tocaores, cantaores y bailaores, formados estos últimos preferentemente por dos, cuatro u ocho parejas, que ataviados con sus trajes típicos bailan al ritmo alegre de las postizas y los instrumentos de cuerda como la guitarra, la bandurria y el laúd. El tema suele ser lírico donde prima el amor y el desamor entre enamorados. También pueden encontrarse algunos temas de tono burlesco con estribillos desenfados y jocosos Generalmente está formada por tres coplas y cada copla consta de estrofa de cuatro versos de arte menor y estribillo de dos. La métrica presenta versos pentasílabos al principio y final de cada copla conjugados con versos heptasílabos en el segundo, tercero con “ole” y cuarto; el estribillo está formado por el verso final precedido de la salida ¡Y olé!. La rima es asonante cargándose la vocal final de los versos primero, tercero y último independientemente que esta palabra sea aguda o no. Ateniéndose a la estrofa, se observa curiosamente que los versos primero y tercero (sin “ole”) son pentasílabos ceñidos en asonante y el segundo y el cuarto son heptasílabos sueltos. Comienza el baile a modo de introducción con un preludio instrumental eminentemente local seguido de una salida cantada, que es un terceto formado en su primer y tercer verso por el primero de la primera copla siendo el segundo verso libre con exclamaciones variadas tales como “mi alma”, “niña”, “ole”, etc. Seguidamente la salida cantada da paso a un interludio que recibe el nombre de falsete. Con ello se da entrada a la primera de las tres coplas que componen la seguidilla. Cada copla consta de una estrofa formada por cuatro versos seguidos de un estribillo a cuyo término los danzantes cierran la danza con un abrazo en corro quedando totalmente inmóviles y en actitud airosa. Esta posición recibe el nombre de "Oros”. Atendiendo a su argumento las dos primeras coplas son conexas, ya que versan en torno al contenido del título, mientras que la copla final se desvincula con una copla popular muy conocida de contenido lírico o humorístico. La particularidad de la seguidilla de Abla es la intercalación de la jota, por regla general, tras la segunda copla para finalizar con la tercera o última copla. A continuación se expone esta versión de “Por un vaso de vino” con arreglo al esquema antes indicado.